desgraciadamente ni fu ni fa
Es una lástima lo he intentado en dos ocasiones y ninguna de las veces me ha entusiasmado y mira que aprecio y admiro a Luis, hermano del dueño pero desgraciadamente no me aporta nada.
Oí ofrecer atún rojo, producto ya que deja un poco que desear.
Yo comí lengua que no estaba mal pero tampoco...
Me pareció curioso que hubiera lengua lo que considero un puntazo pero es lo único que se salia yo creo de lo habitual (bueno y un pollo en pepitoria que también me llamo) tanto en la carta como en las sugerencias.
El servicio un poco raro porque se les veía con experiencia pero no acertaban mucho en la mesa que estábamos y la cocina lenta, lenta.
Llegue a las 14:40 hasta las 15:05 no me trajeron el plato y a las 15:15 me fui a trabajar sin que nadie me ofreciera ni un triste café pero bueno seguiré intentándolo.
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